Según la entidad, el altercado se registró cuando «pobladores de la zona» atacaron las instalaciones.
La Policía agregó que el oficial fue herido con «objetos contundentes» y se limitó a decir que «viene recibiendo la atención necesaria».
Sobre la persona fallecida, solo dijo que el Ministerio Público investiga el incidente.
«La vida de ningún peruano amerita ser sacrificada por intereses políticos», dijo la presidentade Perú, Dina Boluarte, al expresar sus condolencias con un mensaje publicado en su cuenta de Twitter.
Horas antes, las autoridades habían informado que al menos 50 personas, entre ellas policías y trabajadores del aeropuerto de Andahuaylas, en el sur de Perú, estaban retenidas «en calidad de rehenes», luego de una serie de ataques y «actos de vandalismo» que se habían registrado contra la terminal aérea desde el sábado, indicó en un comunicado la Corporación Peruana de Aeropuertos y Aviación Comercial, S.A., Corpac.
Según el comunicado de Corpac, los incidentes han afectado «seriamente la pista de aterrizaje y equipos que son indispensables para brindar los servicios de navegación aérea». Corpac, empresa adscrita al Ministerio de Transportes y Comunicaciones de Perú, agregó que también «han incendiado la sala de transmisiones, sala de combustible, cercando con actos de violencia el terminal, donde se encuentran 50 efectivos de la Policía Nacional del Perú y colaboradores de nuestra empresa».
Corpac pidió a apoyo y refuerzos a la Policía para «poner a recaudo la vida de las personas que se encuentran en calidad de rehenes», aunque no brindó más información sobre su condición.
El comunicado de la Corporación Peruana de Aeropuertos y Aviación Comercial no detalla cuál fue el motivo de los ataques contra el aeropuerto de Andahuaylas, en el departamento de Apurímac, y se limitó a hacer un llamado a la «calma y sensatez de la población que viene atacando –dice– sin razón alguna nuestra terminal».
Medios de comunicación locales, como RPP, reportaron que los incidentes en el aeropuerto se iniciaron cuando manifestantes trataron de evitar que agentes policiales, que llegaron desde Lima, se desplazaran como refuerzos a la ciudad de Andahuaylas, donde este sábado al menos 20 personas resultaron lesionadas, incluidos cuatro policías, en enfrentamientos entre fuerzas del orden y grupos de manifestantes.
En su comunicado de este domingo, la Policía Nacional dijo que ha enviado refuerzos a la zona para «garantizar el orden público y la tranquilidad social».
CNN intenta obtener más detalles de la Policía Nacional de Perú, el Ministerio Público y Corpac.
Andahuaylas es una de las regiones que ha visto manifestaciones esta semana impulsadas, entre otras cosas, por el respaldo al expresidente de Perú Pedro Castillo, quien fue vacado por el Congreso esta semana y posteriormente detenido. Según medios locales, otras de las consignas de los manifestantes son el llamado a elecciones generales, al cierre del Congreso y la convocatoria a la creación de una asamblea constituyente.
Este domingo, la Policía indicó en su comunicado que «garantiza el derecho a las protestas pacíficas, rechaza categóricamente la violencia en cualquiera de sus formas y exhorta a la población a mantener la calma».
Fuente: CNN – Nota original: LINK