En el comunicado, Venezuela explicó que durante las conversaciones de este sábado recibió la propuesta de realizar una reunión de alto nivel con la República Cooperativa de Guyana, que será anunciada en los próximos días, con motivo de una propuesta de diálogo con Guyana.
«En ambas llamadas se ratificó la posición histórica sobre los incuestionables derechos soberanos de Venezuela sobre la Guayana Esequiba, al igual que del carácter legítimo y pacífico de nuestra reclamación, que se ha mantenido estrictamente apegada a las disposiciones del Acuerdo de Ginebra de 1966, y los principios y valores que inspiran nuestra Diplomacia Bolivariana de Paz», dice el comunicado.
¿Qué se entiende por Guayana y qué por Guyana? ¿Hay diferencia?
Además, el comunicado agrega que António Guterres, secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, se comprometió en impulsar los esfuerzos en favor del diálogo directo entre las partes.
La Cancillería de Venezuela dijo que la esperada reunión se llevará a cabo «sin interferencia de actores externos, de acuerdo con lo acordado por ambos países dentro de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños», un grupo regional liderado actualmente por San Vicente y las Granadinas.
Luego de un referéndum nacional la semana pasada, el gobierno venezolano dijo que seguiría adelante con sus planes para anexar la región densamente boscosa de Esequibo, que representa aproximadamente dos tercios del territorio de la vecina Guyana.
Venezuela ha insistido durante mucho tiempo en que tiene un derecho histórico sobre la región, lo que Guyana rechaza. Las fronteras actuales se establecieron en un fallo de 1899 de árbitros internacionales.
En declaraciones a Isa Soares de CNN a principios de esta semana, el presidente de Guyana, Irfaan Ali, dijo que su país está tomando todas las medidas de precaución a nivel diplomático para involucrar a los aliados internacionales «contra el intento desesperado de Venezuela de apoderarse de su territorio».
¿Qué es y dónde queda Guayana Esequiba?
La centenaria controversia entre Venezuela y Guyana por la soberanía del Esequibo, el territorio del noreste de Sudamérica de casi 160.000 km2 con salida al océano Atlántico, ubicado entre las desembocaduras de los ríos Orinoco y Esequibo, ha reavivado en las últimas semanas las tensiones entre Caracas y Georgetown.
¿La razón? El Gobierno de Nicolás Maduro llevó adelante un referendo para, según dice, reafirmar sus derechos sobre esa zona, que actualmente controla Guyana y que Venezuela asegura que le despojaron en 1899 en el Laudo Arbitral de París, que calificó como nulo e «írrito» al denunciar en 1962 ante la ONU supuestos vicios en el procedimiento.
El referéndum del domingo, en gran medida simbólico, preguntaba a los votantes si estaban de acuerdo con crear un estado venezolano en la región del Esequibo, otorgar la ciudadanía venezolana a su población e «incorporar ese estado al mapa del territorio venezolano». Los votantes eligieron el «sí» en más del 95% de las ocasiones en cada una de las cinco preguntas de la papeleta, según informó el Consejo Nacional Electoral venezolano.
La zona, de hecho, corresponde a las dos terceras partes del territorio de Guyana, por lo que una «anexión» de Venezuela, como la ha llamado Georgetown, supondría una amenaza existencial para el país caribeño.
La región es apetecida por la gran cantidad de recursos minerales. Allí hay gran presencia de bauxita, oro, diamantes y manganeso, según el Gobierno de Venezuela, y «se sospecha», dice Caracas, que hay «importantes reservas de uranio, petróleo y gas natural».
Guyana rechazó el referendo y le pidió a la Corte Internacional de Justicia que emitiera una orden de emergencia para detener la consulta popular. La corte ordenó al régimen de Maduro abstenerse de tomar medidas que agraven el diferendo sobre el Esequibo.
Para Georgetown, las acciones de Caracas son «un ejemplo de manual de anexión», reportó Reuters.
El conflicto está latente y las tensiones van en aumento, puesto que Venezuela habla de «despojo» del área y Guyana dice que su vecino anexaría el territorio que por derecho le pertenece, en una clara violación al derecho internacional, según el Gobierno del presidente Irfaan Alí.