Un jefe de la guerrilla Ejército de Liberación Nacional (ELN) murió en una operación de la Armada en el departamento de Chocó, noroeste de Colombia, informó hoy el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas.
El guerrillero fue identificado con el alias de «Alejandro» y, según el ministro, era «uno de los tres jefes del frente de guerra oriental» del ELN, la segunda guerrilla del país.
«Esta operación se hizo el día 30 de marzo y hoy se pudo comprobar la neutralización de este cabecilla», añadió el funcionario en declaraciones a periodistas e indicó que la acción militar tuvo lugar en el municipio de Juradó.
Según Villegas, alias «Alejandro» pertenecía desde hace 30 años al ELN y era el «responsable del adoctrinamiento político de ese frente de guerra, director de las operaciones militares» contra la fuerza pública.
El titular de Defensa exigió además al ELN la liberación de dos conductores que secuestró este miércoles en un retén ilegal que instaló en una carretera que comunica a los departamentos de Risaralda y Chocó, donde esa guerrilla además quemó ocho vehículos.
«El Ejército de Liberación Nacional sabe que el secuestro es algo que fue puesto por delante como condición para poder iniciar los diálogos de paz», apuntó Villegas al referirse a la condición establecida por el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos para comenzar en firme unas conversaciones con esa guerrilla al igual que las que mantiene desde hace tres años con las FARC.
Villegas indicó que las acciones del ELN seguirán «encontrándose con la fuerza pública en todo el país».
«La instrucción del presidente ha sido clara: los diálogos se han abierto sin que el Ejército de Liberación Nacional tome ninguna clase de medida para bajar el conflicto y, por supuesto, la obligación de la fuerza pública es mantener el orden en todo el país», añadió el ministro.
La semana pasada, el Gobierno y el ELN anunciaron en Caracas la fase pública de los diálogos de paz, cuya fecha de inicio aún está por definir.
El diálogo con el ELN tendrá como sede Ecuador y sesiones de trabajo en Venezuela, Chile, Brasil y Cuba, que junto con Noruega serán garantes del proceso.