Las cosas han cambiado mucho para Barcelona en materia de asistencia al estadio entre diciembre de 2015 y abril de este año. Con poco menos de dos meses en funciones y poniéndose al corriente de la alarmante crisis del club, el presidente José F. Cevallos resolvió disputar los dos últimos partidos de local del campeonato pasado en Los Chirijos de Milagro.

La razón fue un proceso de mantenimiento al campo de juego. Pero no se trataba de un negocio a pérdida. El equipo ya había asegurado su cupo a Sudamericana y el promedio del asistencia al Monumental en ese año había sido de 11.296 espectadores; una cantidad similar al aforo del escenario construido en la vecina ciudad.

El encuentro con Universidad Católica saldó con empate a 1. El estadio se colmó con 11.093 aficionados y la recaudación fue de $ 61.022 (las entradas costaron $ 5, $ 10 y $ 15). Una suma nada despreciable ante necesidades tan básicas de entonces, como abonar la nómina atrasada.

Hoy percibir una cantidad parecida suena a pérdida para la administración del equipo, considerando que apenas suma el 29% de los ingresos promedio por taquilla de esta temporada. En los primeros dos meses de torneo Barcelona ha vuelto a tener una importante media de convocatoria superior a los 37.000 hinchas, es decir un incremento del 327% en relación a las de 2015.

El incidente con el hincha Segundo Germán R.M. -quien agredió al juez de línea Byron Romero con una botella- puso en el panorama del club la necesidad de hallar un escenario para hacer de local en la decimotercera fecha frente a Deportivo Cuenca. La mejor opción por ahora es el estadio 9 de Mayo de Machala, una ciudad con una población mayoritariamente amarilla.

Fue en julio del año pasado que el ‘Ídolo’ jugó en este reducto, pero a favor de la directiva de Liga de Loja, que aprovechó la popularidad del cuadro guayaquileño para obtener una buena taquilla y pagar salarios. La fórmula fue exitosa. La ‘Garra del Oso’ percibió una recaudación de $ 96.000 en un reducto con aforo para 18.500 espectadores.

Las localidades tuvieron valores de $ 9, $ 15 y $ 30. Barcelona está en la posibilidad de llenar el estadio machaleño a precios similares y superiores.

Pero tomando en cuenta que en su mejor asistencia en cinco fechas de local ha sido 46.837 aficionados, es evidente que la amplitud del Monumental (56.267 personas) es determinante para el margen de ganancias.

Una vez asimilado el tema económico vale echar una mirada al tema deportivo. La casa del equipo ‘torero’ se ha vuelto un fortín en el que permanece invicto, ha conseguido más del 50% de las unidades que lo tienen como puntero y ha marcado 15 de los 22 goles que lo mantienen bien alejado del segundo. La esperanza es que este rendimiento no sea privativo del Monumental.