«Pido al Departamento de Seguridad Interior acordar el Estatuto Protegido Temporario para los ecuatorianos neoyorquinos y todos los ecuatorianos en Estados Unidos», dijo De Blasio en un comunicado.
El alcalde, cuya ciudad es hogar de unos «140.000 inmigrantes ecuatorianos», justificó su pedido en la necesidad de que las familias «no vivan con el temor de ser expulsados de Estados Unidos mientras su país natal empieza a ser reconstruido» tras el terremoto, que dejó más de 650 muertos y miles de heridos.
Tras recordar que «miles en Ecuador están enfrentando una situación de desplazados», De Blasio afirmó que los ecuatorianos en Nueva York «tienen sus corazones y mentes con los seres queridos en su país» y que «muchos de ellos enfrentan la incertidumbre adicional de si es seguro regresar en este momento».
El Estatuto Protegido Temporario (TPS, por sus siglas en inglés), se concede a los inmigrantes para los cuales no es seguro regresar a sus países debido a un conflicto armado, un desastre medioambiental u otras condiciones extraordinarias.
El pasado 18 de abril, De Blasio había manifestado la preocupación de la ciudad por el terremoto en Ecuador, asegurando que sus servicios trabajaban para canalizar ayuda.