El CJF detalló en un comunicado que dicha opinión fue emitida la semana pasada por el Juzgado Tercero de Distrito de Procesos Penales Federales.
El líder del cártel de Sinaloa está sujeto a proceso ante «la Corte Federal de Distrito para el Distrito Sur de California, Estados Unidos de América, por el cargo de asociación delictuosa para importar y poseer con la intención de distribuir cocaína», señaló el escrito.
Con base en esta opinión jurídica, ahora la Cancillería mexicana tiene unos 20 días hábiles para decidir formalmente si extradita o no al capo, quien el sábado pasado fue trasladado a una prisión de alta seguridad ubicada en Ciudad Juárez, fronteriza con EE.UU.
Uno de los abogados del líder del cártel de Sinaloa, José Refugio, dijo a Efe el sábado que el traslado coincidía con un posicionamiento jurídico de última hora que indica que Guzmán es extraditable a Estados Unidos.
«Eso no quiere decir que (la resolución) haya motivado el traslado», especificó Refugio, a quien se le notificó en la noche del viernes la decisión tomada por el Juzgado Tercero de Procesos Penales Federales en la Ciudad de México.
Sin embargo, una fuente del CJF dijo hoy a Efe que la defensa del Chapo promovió el sábado un amparo ante una posible e inminente extradición a Estados Unidos , tras el sorpresivo traslado de Guzmán al penal federal número nueve de Ciudad Juárez, en el norteño estado de Chihuhaua, desde la cárcel del Altiplano.
El Gobierno mexicano explicó el sábado que el traslado se llevó a cabo por obras para reforzar la seguridad en el Altiplano, localizado en el central Estado de México, y a una rotación de reos.
«Cuando se dio el movimiento de penal los abogados promueven un amparo en contra de la extradición porque suponen que es eso (la extradición)», explicó la fuente del CJF.
La defensa de «el Chapo», añadió, promueve el amparo como «una medida preventiva» con base en diversos artículos, entre ellos el 126 de la Ley de Amparo, que contemplan esa figura por peligro de ataques a la libertad de la persona fuera del procedimiento, incomunicación, deportación, expulsión, proscripción o destierro y extradición.
El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, anunció en enero pasado que su país trabajaba para agilizar el proceso de extradición del capo a EE.UU., donde enfrenta numerosos cargos, entre ellos lavado de dinero y narcotráfico.
Según el Gobierno, dicho proceso podría durar hasta un año desde que comenzó formalmente en enero pasado, unos días después de la recaptura de «el Chapo» en su estado natal de Sinaloa.
Guzmán siempre ha temido una posible extradición a Estados Unidos, pero -según Refugio- a principios de marzo pasado «el Chapo» le pidió que acelerara el proceso debido a las difíciles condiciones que enfrentaba en la prisión del Altiplano.
