El responsable del Centro de riesgo y desastres de Etiopía, Mitiku Kassa, explicó que varias zonas del sur del país ya han sufrido las consecuencias de las intensas lluvias, mientras que cerca de 400.000 etíopes corren el riesgo de sufrir nuevas inundaciones próximamente.
Los últimos datos oficiales sitúan la cifra de muertos en al menos 90, después de que el lunes un deslizamiento de tierra en Wolayita, en el sur, causara la muerte de 41 personas.
«El Gobierno de Etiopía ha formado un grupo de trabajo nacional en el que hay miembros del Ejército, de nuestro Centro y del Ministerio de Sanidad, para hacer frente a esta crisis» explicó Kassa en una rueda de prensa.
Aunque la región del Cuerno de África está sufriendo la peor sequía en décadas debido al fenómeno climático El Niño, las fuertes lluvias fuera de temporada han causado graves daños en todo el territorio etíope.
Las lluvias torrenciales también están dificultando el transporte de alimentos y ayuda humanitaria a algunas zonas afectadas por la sequía.
Según datos de Unicef, Etiopía sufre debido al fenómeno El Niño su peor sequía en 30 años y tiene a más de 8 millones de personas viviendo en una situación de inseguridad alimentaria, con más de 350.000 niños en riesgo de desnutrición.