«Hoy se cierra un periodo difícil para el país y damos el primer paso para salir de la crisis, un periodo que también tendrá sus dificultades», aseveró el primer ministro Alexis Tsipras, quien añadió que «los socios europeos reciben el mensaje de que Grecia respeta sus compromisos, ahora ellos deben demostrar que respetan los suyos» abriendo conversaciones para el alivio de la deuda.
El nuevo paquete legislativo introduce, entre otras medidas, subidas de impuestos indirectos, incluido el IVA, con las que el Ejecutivo espera recaudar 1.800 millones de euros (2.019 millones de dólares) al año.
Con esta nueva ley, el Gobierno liberaliza también la venta de créditos morosos a fondos de inversión, configura el mecanismo de recorte automático del presupuesto en caso de que el Ejecutivo no cumpla los objetivos de superávit acordados con los acreedores y establece un nuevo fondo de privatizaciones que sustituirá al antiguo TAIPED, el cual tendrá más atribuciones.
En la plaza ateniense de Syntagma se produjo esta tarde una manifestación de unas 11.000 personas, según la Policía, que clamaba contra la aprobación de la ley y respaldada por los sindicatos del sector público (ADEDY) y privado (GSEE).
La concentración transcurrió sin incidentes, según las autoridades.