El 23 de junio se firmó en La Habana, Cuba, un histórico acuerdo del cese bilateral y definitivo al fuego entre el gobierno colombiano y las (FARC-EP) que permitirá pasar una página del conflicto interno de más de 50 años.
“Estamos trabajando de forma muy cercana, yo hablo a menudo con la canciller (María Ángela) Holguín para poder coordinar todo el tema de la presencia del estado colombiano en la frontera con Ecuador, nuestra presencia también simultánea en el momento de la desmovilización de los grupos irregulares”, declaró Long en un contacto vía telefónica desde Ginebra, Suiza, donde cumplió hasta este miércoles una agenda de actividades.
El diplomático recordó que aún no se llega a la fase de la desmovilización sino en la de cese el fuego, lo que ya de por sí es trascendental, apuntó, pues de trata “de alguna manera” del fin de la guerra.
“Estamos trabajando muy de cerca para que no nos coja desprevenidos, creo que es una gran noticia para el Ecuador”, subrayó.
Sostuvo que no hay que temerle a la paz y consideró que la posibilidad de que integrantes de las FARC se dediquen en el post conflicto a actividades criminales es muy bajo. El hecho de que haya una reducción de las personas armadas es positiva, recalcó.
En este contexto, añadió que, por sus implicaciones histórico-políticas, una guerra civil es un tema mucho más complejo de abordar que la lucha contra el crimen, en la cual puede haber una cooperación conjunta.
“Vamos a apoyar la paz. Sabemos que la paz va a significar una frontera mucho más fácil de gestionar con Colombia, la presencia, además, del estado colombiano en la frontera –eso no es menor-, eso va a ser de gran ayuda. Además lo estamos haciendo de forma absolutamente coordinada, con mucha transparencia, con nuestros colegas colombianos por lo que tendremos un cronograma en el momento en que se desmovilicen para poder actuar conjuntamente”, informó.
Ecuador mantiene diversos mecanismos de diálogo y cooperación con el gobierno de Colombia, como los gabinetes binacionales (establecidos en el gobierno del presidente Rafael Correa), la Comisión Binacional Fronteriza (Combifron) y ambos países han desarrollado operaciones conjuntas en el combate al narcotráfico y otras actividades ilícitas, recordó el jefe de la diplomacia ecuatoriana.
Long pidió a los ciudadanos no dejarse asustar por la política del miedo y el odio, como se está haciendo en Colombia. “Es mucho más fácil para un político hacer la guerra que la paz. Para hacer la paz hay que ser muy valiente, hay que saber perdonar, hay que tener paciencia; la paz no se logra de la noche a la mañana, hay muchos agravios históricos que hay que resolver”, reflexionó.
El martes, el presidente Correa informó que Ecuador se encuentra reforzando su frontera norte de cara a los acuerdos de paz que buscan concretar el gobierno colombiano y la guerrilla de las FARC.
“Hemos tomado todas las precauciones, estamos reforzando la frontera, teniendo una gran comunicación y coordinación con Colombia”, señaló el jefe de Estado en un conversatorio con medios de comunicación.
Destacó que la firma de la paz definitiva en Colombia sería la mejor noticia de América Latina de los últimos años y beneficiaria enormemente a la región, pero alertó que pueden existir afectaciones para Ecuador.
“Pueden haber problemas porque históricamente en este tipo de procesos hay una parte de milicianos que no se desmovilizan y se convierten en bandas delictivas como sucedió con los paramiliates”, dijo el mandatario ecuatoriano.
Sin embargo aseguró que el país se ha estado preparando para mitigar los efectos negativos que puedan traer al país el fin del conflicto armado colombiano.
