Una ola de ataque suicidas golpeó tres ciudades de Arabia Saudita en 24 horas. Los ataques se producen poco después de grandes atentados yihadistas en el mundo musulmán en la última semana.

CNN

Dos de los ataques fallaron, pero cuatro personas murieron en el tercero. Todos parecen haber sido coordinados, teniendo como blancos las fuerzas de seguridad sauditas y los intereses occidentales.

El más mortal ocurrió en Medina, en donde cuatro personas murieron y otra más resultó herida, según dijo un funcionario. La ciudad es un sitio principal del islam debido a que es donde el profeta Mahoma está enterrado.

El suicida, quien murió en la explosión, buscaba atacar agentes de seguridad, pero se desconoce específicamente quién murió, dijo la fuente.

En Qatif, el este de Arabia Saudita, un suicida pretendió atacar una mezquita chiíta pero fracasó, causándose su muerte, dijo un funcionario con conocimiento en el caso. No hubo heridos.

Cerca del consulado de Estados Unidos en Yida, un suicida causó solo su muerte al hacer detonar un explosivo, según la agencia estatal Saudi Press Agency. Un policía resultó herido.

Nadie se ha atribuido hasta ahora la responsabilidad.

La semana pasada hubo atentados en Turquía, Bangladesh, Yemen e Iraq, que dejaron cientos de muertos. Fueron atribuidos —o se cree que fueron ejecutados— por ISIS.

Los ataques se producen al final del mes sagrado musulmán, Ramadán, y durante la celebración del 4 de julio en EE.UU., el día de la independencia de ese país.