Santos habló en el inicio de las sesiones ordinarias del Congreso, que tendrá que debatir los proyectos de ley que permitirán la implementación de lo que eventualmente se acuerde con el grupo guerrillero.
«No les digo que hagan campaña por el no, ya saben que el sí esta en mi corazón y en el de millones de colombianos. Pero sí les puedo pedir a todo sin excepción que promuevan un debate de altura y con ideas. Con argumentos y no medias verdades. Con realidades y no con mitos. Para que los colombianos libremente definan su futuro», dijo el mandatario.
Esta semana la Corte Constitucional le dio via libre a la modificación de la ley estatutaria sobre mecanismos de participación ciudadana. Para que los colombianos se pronuncien en un plebiscito sobre lo que se pacte con las FARC, la corte avaló la disminución del umbral de votos necesarios para aprobar los eventuales acuerdos de paz.
El umbral de votos se disminuyó del 50% más 1 al 13 % del censo electoral.
En entrevista con Patricia Janiot, José Gregorio Hernández, exmagistrado de la Corte Constitucional de Colombia, dice que el umbral de 13 % garantiza la aprobación de plebiscito aunque haya una participación minoritaria. Hernández dijo que así el Gobierno busca desalentar abstencionismo en plebiscito.
El expresidente y ahora senador Álvaro Uribe, férreo opositor al proceso de La Habana, dijo en Twitter que hay una claudicación, no una negociación, como ha dicho en ocasiones anteriores.
En la negociación ya hay acuerdos parciales sobre participación política, narcotráfico, desarrollo rural, verdad y reparación para víctimas y ahora de cese de hostilidades, aunque en algunos de esos temas hay aspectos puntuales que no se han definido por completo. El gran tema de la agenda que queda pendiente por llegar a un acuerdo es el de la implementación, que incluye la forma de refrendación, aunque el pasado 22 de junio —cuando anunciaron el acuerdo de cese del fuego— las partes dijeron que se atendrán a lo que dictamine la Corte Constitucional.
Hasta ahora, todos esos acuerdos anteriores son parciales —de hecho, los documentos que presenta el equipo de negociación son denominados borradores— y solo hasta el acuerdo final y la refrendación se considerarán efectivos cada uno de los puntos a los que se llegó consenso durante el proceso de diálogo.