El volcán, que está a 1.500 metros de altura, no ha tenido una erupción grande desde 1918. Los científicos dicen que el Katla usualmente estalla cada 50 años.
Dos terremotos de magnitud 4,5 se presentaron en el área este lunes en la mañana.
El servicio meteorológico confirmó un incremento en la actividad sísmica en las últimas semanas y dijo que estaba monitoreando la situación. La erupción no es inminente, dicen los expertos, pero no la descartan.
“Esos aumentos de sismicidad en el verano son muy comunes en [el volcán] Katla y la actividad en la caldera es similar a las agitaciones observadas en 2012 y 2014”, dijo la oficina del servicio meteorológico.
“Las mediciones alrededor de Katla no detectan signos de aumento de la deformación del suelo o temblores, ambos posibles indicadores de movimiento de lava”.
En 2010, el volcán vecino del Katla, el Eyjafjallajokull, causó caos en toda Europa y obligó a cerrar la mayoría del espacio aéreo del continente. Miles de vuelos tuvieron que quedarse en tierra debido a la ceniza volcánica que dejó su erupción.