Democratizar y refundar el sistema de Naciones Unidas, erradicar el terrorismo, finalizar el bloqueo a Cuba, hallar soluciones par ale pueblo palestino son algunos de los objetivos incluidos en esos 11 puntos suscritos en la llamada Declaración de Margarita.
Además, el presidente Nicolás Maduro recibió la presidencia protempore del organismo para los próximos tres años de manos del presidente de Irán, Hasan Rouhani.
El encuentro multilateral incluyó en la agenda del pasado viernes la develación de una estatua de tres metros elaborada en bronce del fallecido presidente Hugo Chávez. El acto contó con los elogios de sus seguidores y fuertes críticas por parte de la oposición, que cuestionó la inversión realizada en seguridad y alimentación en el evento, en contraste con la inseguridad y escasez que se viven actualmente en el país.
«Casi uno siente la tentación de proponerle al eminentísimo presidente de la república que repita esta reunión de los No Alineados, en cada una de las entidades de Venezuela para que llegara comida, para que parapetearan las ciudades, para que tapen los huecos, para que haya agua, para que haya comida, para que haya medicinas, etc», dijo Henry RAmos Allup, presidente de la Asamblea Nacional.
Algunos habitantes de la isla expresaron su rechazo al encuentro noche tras noche, haciendo sonar con fuerza sus cacerolas.
Este domingo, la opositora Mesa de la Unidad Democrática emitió un comunicado en el cual calificaron el evento internacional como un «fracaso», señalando la asistencia de apenas 15 presidentes y de unas tres decenas de delegaciones de un total de 120 países miembros. Consideran que esta es una muestra del aislamiento internacional de Maduro.
El presidente venezolano dijo que la cumbre había sido un éxito y que quieres pretendieron «sabotearla» y «empañarla» no pudieron.
La próxima cita del Movimiento de Países No Alineados se realizará en Baku en el año 2019.