Pasado el nerviosismo inicial por el triunfo de Trump, los participantes han recobrado la compostura y llevado las acciones a puntos más altos.
Tom Elliot, un estratega de inversión en deVere Group, dijo que los inversionistas se están enfocando en cómo las políticas de Trump podrían ayudar a los intereses de los empresarios estadounidenses. Un mayor gasto en infraestructura, impuestos corporativos más bajos y regulaciones más suaves podrían ser parte del menú.
“De todos modos hay preocupación de que, con el rebote de ayer, los mercados financieros solo estén viendo a corto plazo”, dijo.
El mercado de futuros en Estados Unidos ya está subiendo, incluso antes de la apertura, con las acciones del sector farmacéutico a la delantera. Las acciones de Allergan y Pfizer están teniendo un impulso ante la expectativa de que Trump no tomará medidas por la subida de los precios de las medicinas.
La mayoría de los mercados europeos presentan avances de alrededor de 1% en negociaciones tempraneras.
Y los mercados asiáticos vivieron fuertes rebotes después de la áspera sesión del miércoles. El indicador Nikkei de Tokio fue el mayor ganador, con una subida de 6,7%, tras caer 5-4% en la sesión previa.
En tanto, en el mercado de divisas, el yuan chino alcanzó su cotización mínima frente al dólar en seis años mientras los inversionistas sopesaban lo que la presidencia de Trump significará para el comercio entre las dos mayores economías del mundo.
El yuan ha perdido 4,5% de su valor frente al dólar este año, similar a las pérdidas registradas en 2015.
Históricamente, China ha mantenido fuerte control sobre el yuan y limitado el flujo de efectivo dentro y fuera del país.
