Más de 6.000 familias resultaron afectadas por el invierno en el país, que también causó la destrucción de al menos 123 viviendas.
Las provincias más afectadas son: Manabí, Guayas, Napo, El Oro y Los Ríos.
Las intensas lluvias son causadas por el Niño– un fenómeno climático irregular originado cuando se produce un calentamiento anormal en las aguas superficiales del océano Pacífico Ecuatorial, lo que altera la circulación atmosférica y modifica la dirección en la que soplan los vientos.
El fenómeno tiene efectos diferentes en distintas regiones, pudiendo provocar la ocurrencia de abundantes lluvias durante períodos prolongados, así como déficit de precipitaciones, que pueden derivar en sequías.