Una bomba explotó a las 11:30 de la mañana, local, cerca de una mezquita chiita y un mercado en el centro de la ciudad, fuera de una puerta usada exclusivamente por las mujeres, dijeron autoridades locales.
Un grupo escindido de los talibanes pakistaníes, Jamat Ul Ahrar, se adjudicó la responsabilidad del ataque.
El primer ministro Nawaz Sharif condenó el ataque en un comunicado. «El primer ministro reiteró su inquebrantable decisión de eliminar la amenaza del terrorismo del país cueste lo que cueste. La red de terroristas ya está rota y nuestro deber nacional es continuar esta guerra hasta la completa aniquilación del flagelo del terrorismo de nuestro suelo», se lee en el comunicado.