Una persona ha sido detenida en relación con el atentado del pasado 7 de abril con un camión en el centro de Estocolmo, mientras permanece arrestado el autor confeso del ataque, en el que murieron cuatro personas, informó hoy la policía sueca.

La detención se produjo ayer y el fiscal tendrá de plazo hasta este miércoles al mediodía para decidir si presenta una acusación y solicita prisión preventiva, consta en un breve comunicado en el que las autoridades suecas advirtieron de que no facilitarán por el momento información del supuesto delito ni del grado de sospecha.

Rakhmat Akilov, un uzbeko de 39 años que debía ser expulsado de Suecia tras ser rechazada su solicitud de asilo, fue detenido horas después del atentado en un suburbio de la capital tras ser difundidas varias imágenes captadas por las cámaras de seguridad.

En una vista celebrada cuatro días más tarde Akilov aceptó el cargo de delito terrorista con asesinato, por lo que el juez decretó prisión preventiva de un mes.

La policía detuvo dos días después del ataque a otra persona contra la que se presentaron los mismos cargos, aunque con el mínimo grado de sospecha, pero finalmente no hubo acusación formal.

Los servicios de inteligencia ordenaron no obstante que permaneciera bajo custodia, ya que tiene una orden de expulsión pendiente.

Las autoridades migratorias suecas rechazaron en junio la solicitud de asilo de Akilov, que supuestamente había llegado a Suecia en 2014, y tras no hacer caso a un requerimiento para entregarse de forma voluntaria, la policía emitió en febrero una orden de búsqueda.

La investigación policial ha confirmado sus simpatías por el grupo terrorista Estado Islámico (EI), aunque no se han dado detalles sobre sus motivos o sobre si el objeto hallado en el camión que estrelló contra unos grandes almacenes era un explosivo.

Según medios suecos, Akilov ha asegurado en los interrogatorios que actuó por orden directa del EI desde Siria.

El uzbeko es sospechoso de haber conducido el camión que el 7 de abril recorrió casi 600 metros de la principal calle peatonal de Estocolmo atropellando a viandantes hasta estrellarse contra la fachada de unos grandes almacenes.

En el ataque murieron cuatro personas -dos suecos, una belga y un británico- y resultaron heridas quince, de las que una aún permanece hospitalizada.