La explosión ocurrió en la plaza de Altamira de la capital, de la que aún no se sabe que provocó el estallido.
La deflagración se produjo al paso de una columna de policías motorizados y provocó conmoción entre los centenares de personas que se concentraban a poca distancia para rechazar la votación de hoy.
El resto de agentes que integraban la comitiva de la Policía -que desde la mañana reprime con gas lacrimógeno concentraciones contra la Constituyente- bajaron de las motos para auxiliar a sus compañeros y dispararon perdigones y bombas lacrimógenas para mantener lejos a los periodistas, a los que también agredieron.
La explosión de este domingo en Altamira ocurrió mientras quienes se manifestaban en las calles contra las elecciones de hoy se replegaban frente a un edificio de oficinas del sector caraqueño Los Palos Grandes, tras dispersar la Policía en diversos puntos del este de la capital a grupos de personas que se disponían a protestar.
Tras escucharse la ruidosa detonación, que provocó llamas y una humareda negra visibles desde toda la avenida Francisco de Miranda, algunos de los manifestantes se acercaron al lugar de la explosión para interesarse por lo ocurrido.
Minutos después, parte de esos manifestantes -jóvenes con la cara tapada en previsión del gas lacrimógeno que lanzan las fuerzas de seguridad en las marchas- se enfrentaron con agentes cerca de la autopista.
Fuente: El Tiempo Venezuela