Esa decisión no representó la objeción de su salida por parte de los cuatro organismos multinacionales de crédito. Sin embargo, Odebrecht se pronunció sobre las declaraciones de Acciona y desmintió que vaya a ceder su participación en el consorcio.
La multinacional explicó que para sustituir a uno de los socios debían cumplirse cuatro requisitos (autorización previa de la Superintendencia de Control del Poder del Mercado, precalificación técnica y financiera del cesionario, reforma de la escritura pública, agenda al contrato de construcción suscrito por el consorcio y el Municipio de Quito).
Según la multinacional, estos pasos no se han realizado hasta el momento y, por ello, ratificaron su “compromiso con el proyecto”, a pesar de que las autoridades nacionales exigen su salida del Ecuador, tras los recientes casos de corrupción que están bajo investigación de la Fiscalía General del Estado.
El Municipio de Quito solicitó a las dos empresas que encuentren una solución “a la brevedad”.