Una democracia sin controles engendra autoritarismo y corrupción, dijo Moreno, al tiempo de recalcar que «jamás» se prestará para ningún acuerdo que limite la acción del Estado en la protección de los recursos púbicos.
«La lealtad no es a las personas, que quede bien claro, es a la patria», dijo al señalar que ni él ni nadie puede tener confianza ni lealtad «sobre la base de un pacto no ético». Añadió que «jamás» se prestara «para acuerdo alguno que limite la acción del Estado en la protección de los recursos púbicos y la garantía del derecho democrático a la rendición de cuentas de los servidores públicos». «Una democracia sin controles, una democracia sin rendición de cuentas, solo engendra autoritarismo y corrupción, vicios con los cuales nunca transigiré», indicó Moreno en su discurso.
Moreno, quien asumió el poder el pasado 24 de mayo, dijo que la prosperidad, la soberanía, la libertad y la paz no pueden permanecer, y menos aún prosperar, si no hay transparencia y justicia. «Que no se enseñoree la injusticia en el país, que no se enseñoree la corrupción en Ecuador», indicó el gobernante en la ceremonia en la que se designó a nuevos altos cargos de las Fuerzas Armadas.
En la ceremonia, Moreno, quien adelanta un proceso de diálogos con varios sectores, reiteró su confianza en las Fuerzas Armadas. «Jamás permitiré soldados de la patria que, a pretexto de supuestas gestas populares, se trate de herir su dignidad, su orgullo o de humillarlos. Soy su comandante general y les debo cariño, respeto y confianza», subrayó.
Saludó a los 41 000 integrantes de las Fuerzas Armadas, así como a los 8 000 aspirantes que están en proceso de formación e insistió en su confianza en que el Presidente no necesita de ningún otro cuerpo de seguridad para cuidar su integridad.
Además señaló en que su Gobierno garantizará los derechos de los integrantes de las Fuerzas Armadas, sus derechos laborales y salariales, y los recursos para hacerlos efectivos, tanto en el plano de infraestructura logística y medios de acción, como aquellos relacionados con la capacitación, su bienestar y el de sus familias.
Señaló que la Seguridad Social de las Fuerzas Armadas, como la de todos los ciudadanos, es un bien público, «intocable», garantizado por el Estado, que se sostiene con el «esfuerzo y ahorro de los propios afiliados», recordó. Moreno consideró que el país cuenta ahora con unas Fuerzas Armadas «mucho más profesionales que hace una década, comprometidas, sin duda alguna con la democracia, respetuosas de la Constitución y la Ley».
Fuente: El Comercio