«El Pleno del Tribunal Constitucional, por unanimidad, ha declarado la inconstitucionalidad y consiguiente nulidad de las Resoluciones denominadas “Declaración de los representantes de Cataluña” y “Proceso constituyente”, aprobadas el pasado 27 de octubre por el Parlamento de Cataluña», afirma.
El documento del Tribunal describe las acciones que llevaron a la declaración de independencia de Cataluña diciendo que “presuponen que el Parlamento de Cataluña se arroga atribuciones inherentes a la soberanía, superiores a las que derivan de la autonomía reconocida por la Constitución” y añadiendo que desatendieron los pronunciamientos y advertencias del Tribunal.
«La actuación del Parlamento constituye un “grave atentado” contra el Estado de Derecho y conculca “con pareja intensidad, el principio democrático”», añade.
El duelo por Cataluña, la más rica de las 17 regiones españolas, ha sumergido a uno de los países más grandes de Europa en una de sus peores crisis políticas desde la restauración de la democracia en la década de 1970.
Poco después de la votación en el Parlamento catalán, el Senado español en Madrid votó a favor de imponer un mandato directo sobre Cataluña, bajo las provisiones del Artículo 155 de la Constitución española. Estas provisiones nunca se habían aplicado.
Estos poderes permiten a Madrid remover al presidente del Gobierno catalán, Carles Puigdemont, y sus consejeros y ocupar las funciones del Gobierno regional en Barcelona y convocar elecciones.
Un juez español emitió una orden de arresto internacional para el depuesto líder catalán, un día después que ocho miembros del disuelto gobierno de Cataluña fueran encarcelados en España.
Puigdemont y sus colaboradores enfrentan cargos que incluyen sedición, rebelión y mal uso de los bienes públicos.
El expresidente de Cataluña se encuentra en este momento en Bélgica en libertad condicional.