Más de 24 horas después de la explosión, las autoridades aún desconocen el motivo al tiempo que los investigadores trabajan incesantemente para responder preguntas pendientes sobre una casa rodante que estalló en un calle mayormente desierta en una tranquila mañana navideña y fue anunciado con una grabación de advertencia que solicitaba la evacuación de la zona.
El ataque, que causó daños en un edificio de AT&T, continuó causando estragos el sábado en el servicio de telefonía celular y las comunicaciones de la policía y hospitales en varios estados del sur del país.
Investigadores de varias agencias de seguridad federales y municipales acudieron a una vivienda en Antioch, un suburbio de Nashville, después de recibir información relevante para la pesquisa, informó el agente especial del FBI Jason Pack. Otro agente, que no tenía autorización para discutir una investigación en curso y que habló con The Associated Press a condición del anonimato, dijo que los investigadores consideran a una persona relacionada con la propiedad como alguien que podría tener información sobre el caso.
Agentes federales merodeaban la propiedad, realizaron revisiones en el hogar y el patio trasero. Una imagen de Google Maps había mostrado una casa rodante similar estacionada en el patio cuando la fotografía fue tomada en mayo de 2019; un periodista de la AP en el lugar no vio el vehículo en la propiedad el sábado por la tarde.
Hubo otros avances en la investigación, al tiempo que el FBI reveló que estaba buscando a un número de individuos que podrían estar relacionados con el vehículo. Los agentes subrayaron que no han sido hallados más explosivos —indicando que no existe amenaza en el área. Los investigadores también recibieron cerca de 500 pistas.
“Nos va a tomar algo de tiempo”, resaltó Douglas Korneski, el agente especial a cargo de la oficina de campo del FBI en Memphis, en una conferencia de prensa el sábado por la tarde. “Nuestro equipo de investigación está levantando piedra tras piedra” para comprender quién hizo esto y por qué.
Por su parte, la Agencia Federal de Manejo de Emergencias indicaron el sábado en un reporte que se determinó que muestras de tejido halladas en el lugar son de restos humanos. Los funcionarios añadieron que trabajan vigorosamente a fin de identificar a quién pertenecen los restos.
Aparte de eso, las únicas víctimas hasta ahora fueron las tres personas heridas.
Grandes zonas de Tennessee seguían el sábado sin teléfono, internet y otros servicios de telecomunicaciones después de que el viernes temprano explotara el vehículo en el tranquilo centro de Nashville.
Los sistemas de emergencia de la policía en Tennessee y Kentucky, así como la línea directa comunitaria para el COVID-19 de Nashville, estaban fuera de servicio debido a que una oficina central de AT&T se vio afectada por la explosión. El edificio tenía una central telefónica, con equipos de red, pero la compañía se negó a decir exactamente cuántas personas se han visto afectadas.
AT&T informó que tenía problemas para lograr una restauración rápida de los servicios porque hubo un incendio que “se reavivó durante la noche y provocó la evacuación del edificio”.
Detalló que eso obligó a sus equipos a trabajar con ingenieros de seguridad y estructurales y a perforar orificios de acceso al edificio para reconectar la electricidad.
“Nuestros equipos continúan trabajando día y noche en los esfuerzos de recuperación luego de la explosión de ayer por la mañana en Nashville”, aseveró la compañía en un comunicado el sábado. “Tenemos dos sitios móviles portátiles que operan en el centro de Nashville con numerosos sitios portátiles adicionales que se están implementando en el área de Nashville y en la región”, agregó.
El gobernador, Bill Lee, pidió el sábado a la Casa Blanca asistencia federal debido a la “gravedad y magnitud” del impacto de la explosión. Al menos 41 inmuebles resultaron dañados y los sistemas de comunicaciones, incluidos el servicio de telefonía celular y residencial y los centros de llamadas al teléfono de emergencias 911, fallaron en todo el estado, añadió. Precisó que Kentucky y el norte de Alabama también se vieron afectados.
Las interrupciones incluso obligaron a suspender brevemente los despegues de vuelos en el Aeropuerto Internacional de Nashville, pero el servicio operaba normalmente el sábado.
El jefe de la policía metropolitana, John Drake, varios de sus agentes acudieron el viernes a un lugar donde se habían reportado disparos cuando encontraron el vehículo reproduciendo una grabación en la que advertía que una bomba estallaría en 15 minutos. La policía evacuó los edificios contiguos y llamó a la unidad antiexplosivos. El vehículo estalló poco después, según Drake.
La policía cree que el estallido fue intencional, pero se desconoce el motivo o el blanco. Drake subrayó que las autoridades no habían recibido ninguna amenaza antes de la explosión.
Nota Original: El Universo – LINK