Mera fue secretario jurídico de la Presidencia, durante el gobierno del expresidente Rafael Correa. Una vez que dejó el cargo, retornó a su vida profesional privada, en el despacho jurídico Romero Menéndez. Este es el argumento que Mera utiliza en su misiva. “Debido al tiempo transcurrido, he asumido compromisos profesionales de carácter permanente en mi firma de abogados que me hacen imposible, en la actualidad, trasladar mi domicilio a ese país”.
Sostiene que “por esta razón, solicito muy comedidamente que se retire tal nominación, ya que no voy a poder aceptarla, no sin antes agradecer por la referida propuesta”. Y cierra la carta deseándole éxitos al Gobierno del presidente Moreno. Moreno propuso al exsecretario Jurídico como embajador el 30 de junio. Sin embargo, han transcurrido más de tres meses sin una respuesta del Gobierno de Donald Trump.
Este silencio administrativo prolongado no fue aceptado por una negativa por parte de la Cancillería. Espinosa se mantuvo en su argumento de que, dependiendo del país y el proceso legal, el otorgamiento del beneplácito para los nuevos diplomáticos puede tomar tiempo.
Sin embargo, el mismo presidente Moreno, en su último conversatorio con la prensa, el 4 de octubre, aceptó que ya tenía algunos nombres para reemplazar la candidatura de Mera. Pero que era pertinente enviar un comunicado a la Embajada de EE.UU. en Quito, para que responda definitivamente si Mera obtuvo o no el beneplácito.
Fuente: El Comercio