En estos operativos también se medirá el nivel de opacidad y se solicitará al conductor facilitar los documentos habilitantes y se lo someterá a la prueba de alcohotest. Las brigadas están formadas por un supervisor, 2 agentes de tránsito y 4 fiscalizadores.
Las chivas que no presenten los permisos pertinentes. Serán trasladadas a los Patios de Retención Vehicular de la AMT, en donde permanecerán 15 días y deberán cancelar una multa equivalente a 3 RBU, de conformidad a lo establecido en la Ordenanza Metropolitana 247.
A la fecha 52 vehículos han sido autorizados por la Dirección de Matriculación de esta institución, para prestar este servicio. Cabe resaltar que los permisos tienen una duración máxima de seis meses y en temporada de fiestas se podrá emitir una autorización temporal para dicha unidad.
Entre las observaciones que debe respetar este medio de trasporte, son no llevar personas en la parte superior del vehículo, velocidad máxima permitida 30k/h, no se podrá expender bebidas alcohólicas dentro de los vehículos, la circulación por carriles exclusivos está prohibida y no podrán circular por vías que superen el 15% de una pendiente, túneles o ciclovías.
La Agencia Metropolitana de Tránsito, informa a la ciudadanía que para su seguridad, al momento de utilizar estas unidades, deberán verificar que la misma cuente con el adhesivo correspondiente de habilitación debidamente sellado por la AMT, en donde se detalla, capacidad máxima de pasajeros, el número de autorización y plazo de la mismas.