Los trabajos de control del incendio ubicado cerca de la Reserva Ecológica Antisana, a 50 km del sureste de Quito, entre las provincias de Pichincha y Napo, continuaban la tarde del lunes. El hecho fue reportado el domingo, en horas de la mañana, por el ECU 911.

Cuerpo de Bomberos, Policía, comuneros, personal del Ministerio de Ambiente y Comité de Operaciones Especiales (COE) Metropolitano, llevan a cabo los trabajos de sofocación.

El incendio está en los pajonales lo que ha propiciado a que se extienda, a esto se suma la radiación solar, la poca humedad y la velocidad de los vientos.

El sector atesora una gran biodiversidad tanto de flora como de fauna. Entre las especies vegetales están almohadillas, chuquiraguas, frailejones, musgos, orquídeas, pumamaqui, bosques de polilepis y, en cierta parte y a cierta altura, vegetacion propia del bosque húmedo tropical.

Mientras que entre los animales que viven en esa zona están patos, curiquingues, quilicos, gligles, gaviotas de la sierra y colibríes, entre las aves. Los mamíferos que habitan el área mayoritariamente son lobos de páramo, venados de cola blanca, conejos, chucuris y zorrillos.

La presencia de las llamas pone en riesgo a este hábitat. Christian Rivera, del Comité de Operaciones de Emergencia (COE) cantonal señaló esta mañana a EL TELÉGRAFO que los bomberos, miembros de la Policía Nacional, Fuerzas Armadas y del Ministerio del Ambiente que combaten el fuego desde el domingo han encontrado los cuerpos de algunos animales como aves y conejos.

A pesar de ello, una parte de las labores que se realizan en la zona es la búsqueda y rescate de algunos especímenes a los que se está poniendo a buen recaudo. Ese es el caso del pequeño venado de cola blanca rescatado por miembros de la Policía.

Los animales silvestres están siendo llevados a la clínica veterinaria de la Universidad San Francisco de Quito (USFQ).

El Ejército realizó sobrevuelos en la zona.