Esto demuestra que esa oposición utilizará cualquier recurso para sacar una ventaja que electoralmente no pudo conseguir”, señala el documento de tres páginas difundido la mañana de este lunes 7 de agosto del 2017.
La organización provincial, que dirige Marcela Aguiñaga, se reunió ayer domingo en Guayaquil. También se reitera que se respalda la lucha contra la corrupción, que ha sido una constante en la revolución ciudadana desde el 2007.
Por ello, se demandó más celeridad en las investigaciones por parte de las autoridades encargadas.
AP Guayas explicó que, entre otras cosas, hizo su pronunciamiento tras las diferencias públicas, de ciertas decisiones en el ejercicio del Gobierno y las responsabilidades entregadas a grupos que son “prácticas propias de la partidocracia”. En esa línea se solicitó el cambio de servidores públicos, que han asumido cargos con responsabilidad política, y que “están vinculados de forma pública con la partidocracia y el ‘bucaramato’”.
También se hizo hincapié en la necesidad de restablecer los canales de comunicación interna, en aras de escuchar y procesar las alertas, tratar las divergencias “casa a dentro”; y discutir las estrategias que el Ejecutivo desarrolla para consolidar el proyecto político de AP.
Según AP hay intentos desestabilizadores de organizaciones nacientes que pretenden aprovechar la oportunidad “para destruir AP” con la finalidad de ganar las elecciones en los comicios del 2019 y 2021.
“(esas situaciones) Han generado confusión y desconcierto en la militancia y en el pueblo ecuatoriano y ponen en riesgo la consolidación de las transformaciones logradas por la Revolución”, se detalló en el comunicado.
Finalmente el oficialismo en la provincia más poblada del país respaldó el diálogo nacional que impulsa el Gobierno, pero aclara que los invitados deben entender que la iniciativa no es para cogobernar. “Diálogo con la representación social diversa, pero sobre todo, con la militancia”.
Las fracciones al interior de AP a nivel nacional se profundizaron tras el retiro por parte del Jefe de Estado, Lenín Moreno, de las funciones que se habían asignado al Vicepresidente.
Fuente: El Comercio