«Este acto es profundamente desestabilizador para la seguridad regional y socava gravemente los esfuerzos internacionales para la no proliferación», afirmó Ban en una breve declaración a los periodistas en la sede de Naciones Unidas.
El secretario general de la ONU leyó su declaración media hora antes de una reunión de urgencia, a puerta cerrada, convocada por el Consejo de Seguridad para analizar las repercusiones de esa prueba nuclear.
Corea del Norte anunció hoy que ha llevado a cabo su primera prueba con una bomba nuclear de hidrógeno. Se trata del cuarto ensayo nuclear conocido desde 2006, cuando la ONU comenzó a imponer sanciones a ese país por esas pruebas.
«La prueba nuclear subterránea anunciada hoy por Corea del Norte es profundamente inquietante», afirmó Ban.
«Una vez más, este ensayo viola las numerosas resoluciones del Consejo de Seguridad, a pesar de los llamamientos unificados de la comunidad internacional para que cese esas actividades», agregó.
Ban, que no aceptó preguntas de los periodistas, insistió en condenar «inequívocamente» esta decisión del régimen de Pyongyang y le exigió «cesar cualquier futura actividad nuclear y cumplir con sus obligaciones para una desnuclearización verificable».
Por su parte, el embajador ruso ante la ONU, Vitaly Churkin, antes de incorporarse a la reunión del consejo, dijo a los periodistas que era necesario mantener «la cabeza fría» y, en todo caso, aprobar una «respuesta proporcional».