En una carta abierta, la cantante señaló que todos los efectivos involucrados en la muerte del 13 de marzo todavía continúan en activo en el cuerpo policial de Louisville, Kentucky.
«Han pasado tres meses, se han realizado cero arrestos y no se ha despedido a ningún agente», escribió Beyoncé al Fiscal General del Estado, Daniel Cameron.
Los policías directamente involucrados, Jonathan Mattingly, Myles Cosgrove y Brett Hankison, «deben rendir cuentas» a la justicia, reclamó.