El ecuatoriano confiesa que atraviesa un momento incómodo: «Es complicado cuando no estás al cien por cien y no puedes ayudar al equipo. Estoy trabajando para seguir adelante con esta lesión, los doctores están muy pendientes de mí y juntos lo sacaremos. No he podido salir de inicio por estos problemas».
El peso de Caicedo en el once ha descendido en las últimas jornadas, aunque sigue siendo un revulsivo de lujo para el entrenador, Constantin Galca.
«Estoy a disposición de lo que quiera el cuerpo técnico», ha dicho el internacional, que ha insistido en que su idea es «poder ayudar a mis compañeros».
De todos modos, el ariete blanquiazul vive esta situación con profesionalidad pues está «tranquilo».
«La que se lleva el marrón es mi mujer», ha admitido.
El delantero no se obsesiona y se esfuerza día a día para recuperar su mejor versión. «Deseas estar como antes, sin fatiga y sin molestias», ha apostillado.
Por otra parte, Caicedo afronta un partido especial contra el Levante este viernes, ya que fue futbolista ‘granota’ en la temporada 2010-11.
«Siempre es especial para mí. Cuesta ver a tu antiguo club, que te dio mucho, peleando por no bajar, pero yo soy un profesional. Les intento mandar mis buenas vibraciones, aunque defiendo el escudo del Espanyol», ha subrayado.
El futbolista ha advertido de que se encontrará a un rival muy necesitado en el Ciutat de València. «Ellos se lo juegan prácticamente todo, saldrán a morder desde el minuto cero. Quedan finales y afrontaremos este tramo como tal. Es un partido importante para ellos, quizá más que para nosotros», ha dicho.
Por último, Caicedo ha afirmado que la escalada por la permanencia matemática «se hace un poco larga». «El equipo está tranquilo, somos conscientes de lo que nos jugamos y sabemos que van a venir encuentros decisivos para nosotros», ha finalizado.
