«Atención: Tenemos cerca de 2 millones de firmas, se necesitaban (solo) 196.000. Miles de gracias. ¡No hacen falta más!. Esperar firmar 20%», escribió en la red social twitter.
La oposición a Maduro debe entregar a las autoridades electorales la firma de 195.721 electores -correspondientes al 1 por ciento del censo electoral nacional de más de 19,5 millones- para iniciar un proceso que pasará a una segunda fase en caso de que la consulta fuese pedida con la firma del 20 por ciento de los votantes.
«Con nuestros voluntarios en el proceso de auditoría interna de las firmas», añadió Capriles, candidato de la oposición en las dos últimas elecciones presidenciales, ganadas en 2012 por el posteriormente fallecido Hugo Chávez y en 2013 por Maduro.
Capriles lidera al sector opositor que busca poner fin este mismo año al Gobierno de Maduro a través de ese referendo y denuncia que el Consejo Nacional Electoral (CNE) «pone trabas» a esa posibilidad electoral.
Según lo establecido en la Constitución, el referendo puede ser solicitado a mitad del mandato de cualquier autoridad, ecuador que Maduro cumplió este mismo mes tras ganar hace tres años las elecciones que definieron el período presidencial 2013-2019.
Si la oposición gana el referendo este mismo año, el CNE deberá convocar nuevas elecciones, pero si lo hace en 2017 Maduro será reemplazado hasta 2019 por su vicepresidente, Aristóbulo Istúriz.
«Si el referendo revocatorio no es este año no tiene sentido. No nos interesa un mismo Gobierno. O es este año o no hay revocatorio», remarcó esta semana el también gobernador del estado Miranda, con jurisdicción sobre vastas zonas de Caracas.
Adicionalmente al referendo, la alianza de partidos opositores aglutinados en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) impulsa una enmienda constitucional que recorte este mismo año el período presidencial y a la vez conmina a Maduro a dimitir voluntariamente.
Maduro ha opinado que «no tienen viabilidad» los intentos opositores de acortar su mandato y hoy confirmó que ha designado una comisión para revisar «una por una» las firmas de los electores recabadas por la oposición, en previsión de «trampas».
Esa comisión estará liderada por el alcalde del municipio Libertador de Caracas, Jorge Rodríguez, expresidente del Consejo Nacional Electoral y una de las principales figuras del gubernamental Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).