El pasado 30 de diciembre, el hijo de Jiménez y Aleaga viajó a Venezuela con servicio de azafata, y debía retornar al país el 26 de enero. Sin embargo, su regreso no se completó, debido a que el procesado en el caso Metástasis impidió que su hijo viaje nuevamente con acompañamiento de terceros.
El 18 de marzo, Carolina viajó a Caracas para recoger a su hijo, sin embargo, Aleaga no le concedió el permiso para llevárselo de regreso a Ecuador. Frente a este hecho, el prófugo fue llamado al Tribunal venezolano en dos ocasiones, a las que no asistió.
Aleaga tenía “encerrada” a su familia en una casa de Venezuela
Según Carolina, ella junto a su hijo permanecieron en la casa de los padres de Aleaga en Caracas, Venezuela, a quienes calificó como sus “cómplices”. Aseguró que, en ese inmueble, ellos no convivían con su exesposo, sin embargo, vivían “encerrados” desde su llegada al país sudamericano.
Cuando lograron salir de allí el 25 de abril, acudieron a las oficinas consulares de Ecuador en Caracas, donde solicitaron ayuda a la Cancillería para efectuar su retorno asistido. No obstante, Carolina enfatizó que a su caso se le dio un “tinte político”, lo que ralentizó su regreso. Además, consideró que Aleaga podría tener conexión con el personal del Consulado.
“Sabía cada paso que daba y cada movimiento. No sabemos qué clase de persona está infiltrada”, dijo.
Luego de esto, Carolina salió del servicio consular junto con su hijo el 16 de mayo, ante una falta de ayuda por parte de las autoridades, que, a su criterio, dilataron un proceso que habría tardado menos de una semana.
Nelson Jiménez, el abuelo en busca de su nieto
Para Nelson, padre de Carolina, lo sucedido con su nieto levanta sospechas de vínculos entre Aleaga y las autoridades venezolanas.
Detalló que cuando llegó a Venezuela para recoger a su hija por su propia cuenta, sufrió un abuso por parte del régimen de Nicolás Maduro. Al pasar por uno de los controles fronterizos, aseguró que todos los ciudadanos de nacionalidad ecuatoriana fueron retenidos. Posteriormente, viajaron vía terrestre hasta un punto donde se le impidió la salida de su hijo.
Luego de varios días, Nelson y Carolina tuvieron contacto con la Cancillería, que les comunicó los pasos a seguir para lograr el retorno asistido del menor.
Un mensaje a Ronny Aleaga
Nelson exhortó a Ronny Aleaga a entregar a su nieto ante las autoridades para detener el sufrimiento de la familia.
“Él ganó la primera batalla, pero no la guerra. Puede tener los medios económicos y políticos, o un respaldo de Venezuela, pero creemos en la justicia ecuatoriana”, dijo.
Por su parte, Carolina se sumó a las palabras de su padre y precisó:
“Que me lo devuelva, sabe muy bien que tengo la razón. Por gusto me está haciendo sufrir de esta manera. Que deje en paz a mi hijo y a mí”, sostuvo.
