En 2015, el mundo del deporte, específicamente el fútbol, se vio envuelto en uno de los escándalos más sonados. Denuncias de corrupción, fraude y lavado de dinero salpicaron a la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA), el máximo ente rector del deporte rey.

El escándalo de corrupción de la Federación Internacional del Fútbol Asociado (FIFA) también denominado como FIFAGate, explotó el 27 de mayo luego de que autoridades suizas invadieran de manera sorpresiva un hotel de Zúrich, previo a la elección del presidente de la Federación.

La investigación penal que lleva a cabo la Fiscalía de Nueva York se debe a la atribución de los derechos mediáticos, de mercadotecnia y de patrocinio para Estados Unidos y América del Sur, de competiciones organizadas por la FIFA.

Catorce personas, entre ellas nueve asociadas con el órgano del fútbol mundial, fueron acusadas en mayo de 2015 de fraude, crimen organizado y lavado de dinero. Primero detuvieron a siete funcionarios cuando se preparaban para asistir al congreso número 65 de la FIFA en el que se elegiría al nuevo presidente, entre Joseph Blatter y el príncipe Ali bin Hussein. Sin embargo, debido a los problemas, se suspendió la sesión, Estados Unidos pedía la extradición de los detenidos bajo la sospecha de haber recibido 150 millones de dólares en sobornos, otros renunciaron a las presidencias a las que pertenecían.

Después de que el escándalo saliera a la luz, Joseph Blatter puso a disposición su cargo como presidente de la FIFA. En primera instancia, se han arrestado a 9 dirigentes, 3 de ellos se encuentran con libertad bajo fianza, 3 dirigentes se entregaron, 4 se declararon culpables y, únicamente, 1 de ellos se encuentra fugitivo. Luego, a 13 dirigentes más se los involucró en este caso, por lo que se encuentran con orden de captura internacional, entre los que figuran dirigentes de Argentina, Honduras, Brasil y Bolivia.

Nicolás Leoz, quien en ese entonces era el presidente de la Conmebol estuvo arrestado, sin embargo, el Tribunal de Apelación de la Justicia Paraguaya aprobó la extradición a Estados Unidos del también exmiembro del comité de la FIFA por debido a pruebas de fraude. De igual manera, presidentes de federaciones y asociaciones sudamericanas, como dirigentes de Argentina, Chile y Colombia, también han estado envueltos en este caso de corrupción.

El fútbol ecuatoriano fue salpicado por este caso de corrupción y su máximo líder, Luis Chiriboga, cumple una orden de arresto domiciliario, además de tener una orden de captura internacional en su contra.

FIFAGate es el caso de corrupción más grande en la historia del fútbol y quizás del deporte en general.