En el mismo día de la audiencia de formulación de cargos contra los 16 militares implicados en la presunta desaparición forzada de los cuatro menores de Guayaquil, la Fiscalía confirmó que los cuerpos hallados en la parroquia de Taura corresponden a los niños.
Se trata de Ismael y Josué Arroyo, de 15 y 14 años, y sus amigos Saúl Arboleda y Steven Medina, de 15 y 11 años, respectivamente.
La desaparición
El pasado 8 de diciembre, los menores salieron a jugar fútbol en el sur de Guayaquil pasadas las 20h00 cerca de la av. 25 de julio, donde fueron vistos por última vez. De acuerdo con información preliminar, fueron detenidos por una patrulla militar que circulaba en la zona.
El Gobierno no emitió un pronunciamiento oficial sino hasta después de 13 días, cuando atribuyó el hecho a organizaciones criminales. Algo que, fue desmentido posteriormente por el ministro de Defensa, Gian Carlo Loffredo, quien señaló que los niños fueron aprehendidos en un acto contra un presunto delito flagrante. Sin embargo, fueron liberados posteriormente.
Esta versión fue refutada por el fiscal que intervino en la acción de habeas corpus presentada por los familiares de los menores, quien señaló que no existe evidencia para determinar que ellos estuvieron involucrados en un robo previo a su detención. Fue la jueza Tanya Loor quien declaró la “desaparición forzada” de los menores.
Cuerpos hallados en Taura
El 24 de diciembre, se hallaron cuatro cuerpos incinerados en el cantón Naranjal, en la parroquia de Taura. Los familiares de los menores acudieron al Laboratorio de Criminalística para entregar muestras de ADN de sus hijos, evidencias que determinaron que los cadáveres correspondían a los de Saúl, Ismael, Steven y Josué.
Militares procesados
16 militares implicados en el caso Malvinas cumplirán prisión preventiva tras una disposición del juez que lleva la investigación. Durante la audiencia de formulación de cargos, la Fiscalía presentó elementos de convicción que sustentan la presunta participación de los procesados en el delito de presunta desaparición forzada.
Entre las evidencias constan testimonios de familiares y testigos, informes de peritos forenses e investigadores, evidencias físicas, como los celulares de los procesados, registros de video y vehículos utilizados durante el operativo. Además, informes de inspección ocular.
El magistrado también se pronunciará de manera escrita sobre las medidas de protección solicitadas a favor de los familiares de las víctimas.
Hasta el cierre de esta entrega, las autoridades no se han pronunciado sobre los resultados de las pericias de la Fiscalía.
