El ‘Rey Arturo’ anotó el polémico penal, que el juez estadounidense Jair Marrufo cobró a instancias de su segundo línea por mano (que pareció casual) de un jugador boliviano en su área, con un remate a la izquierda del portero Carlos Lampe, que se jugó hacia el otro lado.
«Es una vergüenza lo que han hecho», dijo el DT de Bolivia, Julio César Baldivieso, quien lamentó amargamente lo ocurrido que «la selección chilena no necesita de la ayuda de un árbitro» para ganar un partido que parecía condenado a un empate.
Lampe, a su vez, dijo que al llegar a los vestuarios no pudo contener el llanto. «Fueron lágrimas de bronca. Todo el trabajo que veníamos haciendo fue arrojado a la basura. Duele mucho perder de esta forma».
Por su parte, Vidal respondió con una sonrisa a las quejas bolivianas. «Habría que recordarles que antes ya había habido otro penal que no fue cobrado», comentó.
El volante del Bayern alemán había puesto a Chile en ventaja al minuto 46, pero el boliviano Jhasmani Campos decretó el empate con un formidable tiro libre a los 61 minutos, en el partido por la segunda fecha del Grupo D jugado en el estadio Gillette de Foxborough (noreste), cercana a Boston.
El DT de Chile, Juan Antonio Pizzi, señaló que «más allá de todo, creo que nadie tiene dudas de que merecíamos ganar. Tuvimos más oportunidades y pusimos el ritmo del partido. Por eso, más allá de la polémica, creo que merecíamos ganar este partido».
Empujado por la imperiosa necesidad de la victoria, Chile pisó con más fuerza el acelerador, con más ímpetu que claridad, y creó peligro frente al arco de Lampe, en especial con disparos de media y larga distancia.
Ya a 10 minutos del final, Baldivieso optó por la cautela, retirando del terreno a uno de sus atacantes natos, Yasmani Duk, para darle entrada del mediocampista Walter Veizaga para contener las embestidas de Chile.
Hasta que a los 90+8 minutos llegó el penal de la polémica, que el ‘Rey Arturo’ se encargó de rematar con clase a los 90+10 y permitirle a Chile respirar aliviado.