Al menos cinco personas, tres de ellas menores de edad y una salvadoreña, fueron arrestadas hoy en Guatemala acusadas de participar en el ataque a un autobús el pasado mes de marzo que se saldó con dos muertos y 17 heridos.

Los detenidos, según el reporte policial, son tres adolescentes de 17 años; una joven de 19, identificada como Nelsy Yuvitza P. T., y el salvadoreño Julio Cesar L. F., de 22 y conocido como «El Chino», todos integrantes de la clica «Vatos Locos», de la pandilla Barro 18.

La investigación permitió a las autoridades establecer que esta organización criminal, dedicada al cobro de extorsión a comercios, autobuses y taxis, es la responsable del ataque con bomba que el pasado 6 de marzo se saldó con dos fallecidos y 17 heridos.

Los integrantes de la estructura, cuando no se les hace efectivo el pago de la extorsión, «toman represalias», señaló la Policía, que ve esto como el móvil del suceso.

La operación «Cóndor», desarrollada en el municipio capitalino de San José Pinula, donde se produjo la detonación de la bomba, permitió la aprehensión de estas personas, que están acusadas de los delitos de «asesinato, asesinato en grado de tentativa, asociación ilícita y extorsión».

La jefa de la Fiscalía de Sección de Delitos Contra la Vida, Miriam Ambrosio, explicó en una conferencia de prensa que «El Chino» y uno de los adolescentes son los «autores materiales» de la explosión del artefacto, por la que las autoridades ya detuvieron a otra persona el pasado mes, que no fue identificada.

Para probar la culpabilidad de todos los detenidos, la Fiscalía y la Policía ha recabado diversas pruebas, como escuchas, ropa, móviles e imágenes de las cámaras de vigilancia.

Ante este operativo, el ministro de Gobernación (Interior), Francisco Rivas, dijo que se trata de un resultado «importante» que refleja el trabajo de la Policía Nacional Civil y del sistema de Justicia.

«Hay autores materiales y autores intermediarios que participaron en este hecho», dijo el funcionario en referencia a los cinco detenidos, y agregó que toda la clica, formada por 25 personas, muchas de ellas recluidas en la prisión de Fraijanes por otros delitos, ya está desmantelada.

El pasado 17 de marzo, la radio local Emisoras Unidas divulgó un vídeo en el un grupo de pandilleros de la mara 18 recluidos en una cárcel de Guatemala admitía haber asesinado al responsable del ataque.

Los mareros, que guardan prisión en la cárcel de alta seguridad de Fraijanes I, reconocían ante la cámara que ellos mataron al reo Óscar Armando Lorenzana Gómez, alias «El Arjona», y advertían que otros colaboradores también habían corrido la misma suerte.

En el tórax de «El Arjona» las autoridades encontraron una nota en la que se le responsabilizaba del ataque, perpetrado el domingo 6 de marzo y que en un primer momento fue atribuido por los organismos de seguridad a las pandillas que operan en el país.

Lorenzana guardaba prisión desde 2008 y en 2009 fue condenado por el Tribunal Décimo de Sentencia Penal, Narcoactividad y Delitos contra el Ambiente de Guatemala a 40 años de cárcel por la muerte de dos personas.

Según las autoridades, él era el líder de la clica y fue el que dio la orden del ataque al autobús, a pesar de estar en prisión.

Poco después de darse a conocer las detenciones de este sábado, el presidente, Jimmy Morales, usó las redes sociales para felicitar a la Fiscalía y también a la PNC.

Guatemala es uno de los países más violentos del mundo, según organismos internacionales, y a diario se comenten unos 16 asesinatos.

La nación integra junto a Honduras y El Salvador el llamado Triángulo Norte centroamericano, considerado una de las zonas más violentas del mundo tanto por el aumento del narcotráfico y la presencia de aliados de los carteles mexicanos, como por la debilidad de las instituciones estatales, según Naciones Unidas.