Ligia Luna, directora de Vigilancia Epidemiológica del Ministerio de Salud Pública, en entrevista en Notimundo a la Carta con Marcela Holguín, confirmó que cinco mujeres embarazadas registran el virus del zika en Ecuador.

Ligia Luna,  directora de Vigilancia Epidemiológica del Ministerio de Salud Pública, en entrevista en Notimundo a la Carta con Marcela Holguín, confirmó que cinco mujeres embarazadas registran el virus del zika en Ecuador. De ellas, una representa mayor riesgo porque se encuentra en la sexta semana de gestación y el feto podría desarrollar microcefalia. «A partir de la semana 20 de gestación podríamos ver ciertas características y riesgos que nos señalen que el niño puede nacer con este problema», dijo la funcionaria, quien afirmó que tres de cada cuatro personas infectadas puede no desarrollar síntomas, pero en quienes sí son afectados los síntomas pueden durar entre dos y siete días.

Luna informó, además, que en el país se reportan  84 casos confirmados y 72 casos sospechosos de zika, y que es cantidad podría aumentar en las próximas semanas. Por ello, recomendó controlar la proliferación del mosquito Aedes aegypti a través de la eliminación de los criaderos, comunicar oportunamente un caso sospechoso a las unidades de salud, usar mosquiteros y mallas finas en las puertas y ventanas, utilizar ropa clara que proteja contra picaduras de insectos, camisas de mangas largas, pantalones largos y zapatos cerrados, y aplicar repelente de insectos en la piel expuesta y en la ropa usándose de conformidad estricta con las instrucciones de la etiqueta del producto.

Asimismo, señaló que los síntomas de la enfermedad son fiebre, sarpullido, dolor de cabeza, dolor en las articulaciones, dolor muscular, malestar general y conjuntivitis no purulenta que ocurre entre tres a doce días después de la picadura del mosquito vector. «El zika no representa riesgo de muerte, aunque en algunos casos podrían existir complicaciones neurológicas que originan el síndrome de Guillain Barré y meningoencefalitis, microcefalia en recién nacidos que puede ocasionar complicaciones cerebrales y retraso mental», acotó.