El nuevo modelo, con dos versiones, iPhone 7 y iPhone 7 Plus, tiene mejores capacidades en foto y en video, mayor resistencia al agua, mayor capacidad en la batería y, a diferencia de sus predecesores, no tiene la entrada de 3,5 mm para conectar unos auriculares, una decisión que ha levantado mucho debate desde que se presentó el 7 de septiembre.
Las acciones de Apple subieron un 3,4% el jueves, hasta 115,56 dólares, signo de la confianza en el éxito del nuevo modelo, que ya se agotó en las preventas, algo que algunos analistas consideran una estrategia deliberada de la marca.