La norma busca un sistema de seguridad social sostenible en el tiempo, haciendo ajustes a las pensiones de los servidores públicos de estos sectores que son parte de un régimen especial de la seguridad social.
Con criterio de equidad y justicia social este proyecto propone incrementar de 20 a 25 años, los años de servicio en la institución; que el cálculo de las pensiones de retiro en las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional sea sobre los cinco mejores años de salario, tal como ocurre en la actualidad para cualquier empleado asegurado.
Según la propuesta, las pensiones que otorgan el ISSFA y el ISSPOL se incrementarán al inicio de cada año en la proporción de la inflación promedio del año anterior, beneficiando a la tropa y mandos medios.
En el marco del primer debate en el Pleno, se aclaró que en ningún momento se busca restar importancia, ni derechos y peor afectar a las Fuerzas Armadas, considerando que la reforma no tiene que ver con la institucionalidad.