Este jueves 14 de enero, el Servicio de Contratación Pública (Sercop) inició la subasta inversa de medicamentos para la adquisición de 425 tipos de fármacos que servirán para surtir a 6.604 unidades de salud que forman parte de la Red Pública Integral de Salud (RPIS). Sin embargo, el gremio de farmacéuticos se opone a la medida por considerar que se afecta gravemente a la industria nacional.

Renato Carló, presidente de la Asociación de Laboratorios Farmacéuticos del Ecuador (ALFE), explicó a Notimundo que la subasta tiene vicios de nulidad, pues se basa sobre el estudio de un porcentaje de preferencia que no tiene respaldo técnico. Es que dentro del proceso se estableció un máximo del 17,5 % como valor preferencial para los productores nacionales de fármacos, cuando en 2011, año de la anterior subasta, el Ministerio de Industrias recomendó que se de un 38 % de ventaja a la industria nacional.

«Ese 38 % era en otras condiciones, hoy, que estamos en una situación económica adversa, el señor Santiago Vásquez (secretario del Sercop) nos da el 15 %, porque el 2,5 % es solo si se exporta, entonces, ¿qué ventaja nos están dando a la industria farmacéutica?», se cuestionó Carló. Asimismo, advirtió que con esta subasta se están poniendo en riesgo a 15 mil plazas de trabajo por la baja rentabilidad que evidenciaría el sector en los próximos meses. «El señor Vásquez se permite decir que la industria no ha crecido, cuando el sector ha invertido 95 millones de dólares en sus instalaciones», criticó.

Además, comentó que «no tenemos ninguna alternativa, sino ver cómo la industria farmacéutica nacional se va a desbaratar y el señor Presidente de la República falta a su palabra». Carló añadió que han tratado de hablar con Vásquez, pero que la reunión no se ha concretado.