Los jóvenes Salomón Aceves Gastélum (25), Daniel Díaz (20) y Marco Ávalos (20) fueron secuestrados y torturados antes de su muerte y se habría intentado hacer desaparecer sus cuerpos disolviéndolos en ácido, precisó Lizette Torres, jefa de investigación de la fiscalía en un conferencia de prensa.
La funcionaria precisó que aunque aún se están procesando las pruebas halladas en la vivienda donde se encontraron los restos humanos, «los indicios localizados y encontrados… nos hace inferir lógicamente» que se trata de los tres jóvenes estudiantes de cine de la privada Universidad de Medios Audiovisuales.
Los tres jóvenes fueron vistos por última vez el pasado 19 de marzo cuando regresaban a sus casas tras una filmación en la localidad de Tonalá, donde fueron interceptados por sujetos armados que se los llevaron por la fuerza en dos vehículos.
Se presume que los autores del crimen serían integrantes del Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), una de las organizaciones más poderosas del narcotráfico en México, según información de autoridades.
Las investigaciones, que incluyen los testimonios de dos presuntos miembros del CJNG detenidos, apuntan a que una tía de uno de los estudiantes ultimados estaría vinculada con una organización rival denominada cartel Nueva Plaza. Torres aclaró, sin embargo, que no se encuentra acreditado que ninguno de los estudiantes tenga vínculos con algún cartel delictivo.
La desaparición de los tres jóvenes generó numerosas protestas en el estado, organizadas principalmente por estudiantes que exigían su retorno con vida y se quejaban de la corrupción de las autoridades.
Los cineastas mexicanos galardonados con el Óscar, Guillermo del Toro -originario de Guadalajara-, Emmanuel Lubezki y Alfonso Cuarón también habían exigido públicamente la aparición de los tres jóvenes. Según cifras oficiales, hasta 2017 se contabilizaban en México 33.513 personas desaparecidas.
Fuente: El Telégrafo