El Congreso Nacional de Argentina aprobó en las últimas horas del viernes 4 de diciembre del 2020 una ley que grava por única vez las grandes fortunas de personas en el país.

Según el Senado argentino, los fondos recaudados se destinarán a equipamiento e insumos para la emergencia sanitaria por el covid-19. Crédito: Reuters.

El Congreso Nacional de Argentina aprobó en las últimas horas del viernes 4 de diciembre del 2020 una ley que grava por única vez las grandes fortunas de personas en el país.

El objetivo es financiar al Estado ante el impacto de la pandemia de covid-19, luego de que el Senado sancionara el proyecto que ya había sido aprobado por la cámara baja.

El proyecto, impulsado por el Gobierno del presidente Alberto Fernández, fue aprobado por 42 votos a favor y 26 votos en contra, señaló la Cámara de Senadores argentina en su cuenta oficial de Twitter.

«El #AporteSolidario es extraordinario porque las circunstancias son extraordinarias. Debemos encontrar puntos de conexión entre los que más tienen para aportar y los que necesitan», dijo la senadora oficialista Anabel Fernández Sagasti en su cuenta de Twitter.

La Ley de Aporte Solidario y Extraordinario grava por única vez en al menos 2% a las personas físicas cuyos patrimonios superen los 200 millones de pesos (USD 2,45 millones), con lo que el Gobierno recaudaría cerca de 300 000 millones de pesos (USD 3 674 millones) con el impuesto.

Según el Senado argentino, los fondos recaudados se destinarán a equipamiento e insumos para la emergencia sanitaria por el covid-19, asistencia a las pequeñas y medianas empresas, la urbanización de barrios pobres, como también programas de exploración y desarrollo de gas natural.

El proyecto de la coalición peronista que Gobierno a Argentina hace un año recibió críticas de la oposición, que señaló que el gravamen incluye capital de trabajo y bienes de cambio.

La tercera economía más grande de América Latina se encamina a su tercer año de contracción económica, con elevadas tasas de inflación y un fuerte aumento de la pobreza, producto del agravamiento de su crisis económica generado por la pandemia de covid-19.

Nota Original: El Comercio