La medida comenzará este domingo y estará en vigor al menos una semana hasta el 6 de septiembre.
La norma implica que cafés y restaurantes de las ciudades de Seúl, Incheon y la circundante provincia de Gyeonggi solo podrán operar hasta las 21:00 cada noche y solo podrán vender productos para llevar desde esa hora hasta las 05:00.
La medida también afecta a la inmensa mayoría de bares, que en Corea del Sur suelen operar con licencia de restaurante.
A su vez, a las grandes franquicias de café que abundan en el país asiático y que gozan de enorme popularidad se les impedirá servir nada que no sea para llevar independientemente de la hora que sea.
En total unos 380 000 establecimientos de hostelería se verán afectados.
También se obligará a las academias extraescolares de la región capitalina a ofrecer clases online al menos y se obligará a cerrar gimnasios y a clubes deportivos bajo cubierto.
Las autoridades surcoreanas no han querido de momento implementar todas las medidas correspondientes al nivel de 3 de su plan de distanciamiento social por temor al daño económico.
En todo caso, las medidas anunciadas hoy para la región en torno a Seúl, que viene absorbiendo más de un 80 % de los nuevos casos y que concentra 26 millones de personas (más de la mitad de la población nacional), han sido mal recibidas por el sector hostelero, que teme un daño importante.
El resto del país, que registra incrementos de casos diarios de tres dígitos desde el pasado 14 de agosto, seguirá de momento en el nivel 2 de restricciones, que implica cierre de espacios públicos como museos o bibliotecas, de estadios deportivos y que prohíbe las reuniones de más de 50 personas en interior y de más de 100 en exterior.
Hasta ahora Corea del Sur, que hoy reporto 341 nuevos casos, había controlado muy bien la pandemia gracias a su sistema de rastreo y sin recurrir a confinamientos o cierre de fronteras.
A día de hoy solo suma en total 19 000 infectados y 313 muertos, con una incidencia a 14 días de apenas 7,5 casos por cada 100 000 habitantes, más de diez veces menos que muchos países europeos.
Nota Original: El Universo – LINK