La Cámara Federal Argentina ordenó investigar a la expresidenta Cristina Fernández por su vínculos con el empresario Lázaro Báez. Y en otro caso, la justicia allanó unas 10 propiedades de la familia Kirchner, en la causa conocida como Los Sauces.
Son dos investigaciones: por un lado un tribunal presentó una acusación formal contra Lázaro Báez por presunto lavado de dinero (tras el video de personas contando dinero) y se investiga si hay vínculos con la exmandataria. Y por otro lado, el juez federal Claudio Bonadío, que investiga presuntas irregularidades en la sociedad de la familia Kirchner llamada Los Sauces, ordenó los allanamientos en varias municipalidades. No hay nadie acusado en este último caso.
La exmandataria dice que desde hacia décadas no se veía un abuso de poder y persecución política semejante.
La exmandataria no ha sido acusada formalmente en la causa Los Sauces, pero las investigaciones tratan de determinar si el alquiler de estos inmuebles a contratistas de su gobierno corresponden a sobornos o retornos a los Kirchner por los negocios entregados a sus dos clientes principales: Lázaro Báez y Cristobal López.
Esa es la denuncia en la causa presentada por la diputada opositora Margarita Stolbizer.En entrevista con Patricia Janiot, la abogada de Stolbizer, Silvina Martínez, dijo que para evitar sanciones, la expresidenta «utiliza como pantalla una empresa alegando que solamente es accionista».