El grupo, integrado por 26 médicos del contingente de médicos especializados en situaciones de desastre y graves epidemias «Henry Reeve» y 25 miembros de un equipo de salvamento, partieron con una primera ayuda de «material gastable y medicamentos», suficientes para un mes de trabajo «en condiciones de emergencia».
La contribución de Cuba se suma a los más de 700 colaboradores de la salud que brindan sus servicios de forma permanente en Ecuador, indica el estatal diario Granma, que resalta esta ayuda como una muestra más de la «solidaridad y el apoyo al Gobierno y al hermano pueblo ecuatorianos» por parte del país caribeño.
Autoridades de la isla, entre ellos el viceministro de las Fuerzas Armadas, Ramón Espinosa; el jefe de la Defensa Civil, Ramón Pardo; y el ministro de Salud en la isla, Roberto Morales; despidieron a la brigada, integrada por colaboradores de las provincias occidentales de La Habana, Matanzas y Pinar del Río.
Para informar sobre la labor de los médicos y rescatistas, junto al grupo también viajó un equipo de la televisión estatal cubana.
También hoy, el presidente de Cuba, Raúl Castro, envió en un mensaje sus «más sentidas condolencias» a su homólogo de Ecuador, Rafael Correa, las que extendió «a los familiares de las víctimas y al pueblo ecuatoriano», según una nota de la estatal Agencia Prensa Latina fechada en Quito.
Castro aseguró a Correa que «puedes contar, como siempre, con la colaboración de Cuba».
El contigente «Henry Reeve» ha prestado auxilio en Pakistán, Guatemala, Chile, Nepal, Haití y Dominica.
Cerca de medio millar de expertos de nueve países ayudan a Ecuador en las tareas de rescate de víctimas tras el terremoto de magnitud 7,8 en la escala abierta de Richter, que sacudió el sábado la zona tropical del norte de Ecuador.
El sismo, uno de los más fuertes que ha azotado Ecuador, dejó al menos 272 muertos y 2.068 heridos, además de un número indeterminado de desaparecidos.