Así lo decidió su familia, acatando las recomendaciones emitidas por la Armada del vecino país, ante los peligros que representa rescatar un cuerpo a esa profundidad debido a la variedad de presión y corriendtes submarinas.
Según medios locales, la familia de la fallecida envió una nota en la que no autoriza ninguna maniobra de rescate del cuerpo y agradece el apoyo prestado por Guardacostas, quienes durante 18 días ininterrumpidos mantuvieron la búsqueda hasta dar con el cadáver.
En fecha y sitio por definir se realizará una ceremonia simbólica, con presencia de la familia que aún permanece en Ecuador.
El 20 de diciembre de 2016 la lancha en la que viajaba la fallecida naufragó cuando el motor se detuvo y una ola la viró. El cuerpo fue encontrado el sábado 7 de enero.