Con experiencia en telecomunicaciones y administración de empresas, Juan Iván Cueva es la carta del movimiento Amigo para llegar a la Presidencia de la República. El candidato que arranca ahora su recorrido en la política dice haber formado un proyecto político desde cero, con una estructura, liderazgo y un objetivo en común: el bienestar del país.
Su aspiración de llegar a Carondelet se da bajo una postura “social-demócrata”, según dijo, para permitir la articulación entre el sector privado y el Estado. “Soy un socialdemócrata. Considero tanto Estado como sea necesario, tanta empresa como sea posible. Me considero una persona de centro izquierda”, dijo.
A partir de este concepto, su propuesta es plantear “ideas revolucionarias” en el ámbito tecnológico. Una de ellas es la incorporación de la inteligencia artificial y la modernización de sistemas computacionales. Algo que, según Cueva, es su campo de acción al contar con experiencia desde el 2013 hasta el 2015 en asesorías brindadas al expresidente de Uruguay, José Mujica.
Para esto, indicó, serán necesarias alianzas público-privadas. Sin embargo, aclaró que esto no significará una privatización de los sectores estratégicos como el petrolero, eléctrico, entre otros.
El rol de Cristina Reyes
En caso de llegar al poder, Juan Iván Cueva adelantó que su trabajo será unido y entrelazado con Cristina Reyes, su candidata a la Vicepresidencia. Indicó que sus criterios serán compartidos al momento de la toma de decisiones, algo que, recordó, no se ha reflejado en el gobierno de Daniel Noboa, tras las fricciones con Verónica Abad.
“No la voy a mandar fuera del país o le voy a dar cargos que no son de relevancia, sino que ella va a estar en la toma de decisión del poder”, sostuvo.
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