La presidencia francesa de la COP21 entregó en la tarde de hoy el documento a las delegaciones asistentes a la COP21, tras poco más de dos días y medio de trabajo de los facilitadores del texto, en el Parque de Exposiciones París Le Bourget, al norte de la capital gala.
Ahora las delegaciones de 195 países y la Unión Europea analizarán en detalle la nueva propuesta de acuerdo climático, y a las 20:00, hora local, se reunirá de nuevo el plenario para debatir el documento.
Se espera que el nuevo acuerdo climático sea concluido el viernes, tras dos semanas de labor de la Conferencia del Clima COP21.
Con ese instrumento, la humanidad buscará limitar el calentamiento global del planeta, para evitar mayores daños a los ecosistemas marinos y terrestres, incluyendo la vida humana.
Paralelamente a los debates que se desarrollaron en las mesas de diálogo, en el pasillo central del Parque de Exposiciones Le Bourget, sede de la Cumbre Climática COP21, se ubicó este miércoles un enorme mural en forma de banderola que muestra 196 mensajes escritos por niños, que animan con esperanzas el logro del acuerdo universal que salve el planeta.
La pancarta gigante almacena las cartas junto a barras de chocolate en bolsitas con la representación de cada una de las 196 banderas de todas las delegaciones presentes en las negociaciones, que sesionan para sellar un documento jurídico sobre el clima.
La iniciativa es llevada a cabo por niños participantes en el programa de la Agencia Forestal Júnior de zonas verdes en la región de Ile-de-France, la escuela parisina Living School, y la iniciativa «Señoras y Señores Jefes de Estado, los niños tienen algo que decirles».
Originalmente, los niños y los delegados se reunirían juntos para plantar 196 árboles cerca de Le Bourget, pero la actividad fue cancelada por razones de seguridad tras los mortales atentados terroristas del 13 de noviembre en la Ciudad Luz.
Esta compilación de banderas y mensajes, que representan el espíritu del proyecto, será enviada a la delegación marroquí, anfitriona de la próxima COP22 en Marrakech.
Mientras tanto, el grupo ecologista Greenpeace ha colocado un oso polar gigante fuera del recinto donde se están llevando a cabo las negociaciones para concienciar del uso de energías renovables para preservar el planeta.