Directivos del diario El Carabobeño denunciaron que el gobierno de Nicolás Maduro está usando el control del dólar para censurar los medios de comunicación que son críticos contra su gobierno.

El diario El Carabobeño, uno de los más antiguos de Venezuela, anunció su salida de circulación debido a la falta de papel importado, una situación que mantiene en riesgo a otros 85 periódicos.

Tras 82 años de operaciones el periódico, que tiene su sede en el estado central de Carabobo y cubre ocho de los 24 estados del país, dejará de circular a partir de hoy y solo saldrá en formato digital, indicó Carolina González, la jefa de redacción, a varias agencias de noticias. La salida de circulación pone en riesgo a unos 266 trabajadores.

El diario dijo en un comunicado que la empresa Complejo Editorial Alfredo Maneiro, que desde hace unos años importa el papel periódico para los medios locales, «no le vende la materia prima desde hace un año», situación que los llevó a agotar sus provisiones de papel que alcanzaron hasta este jueves. González atribuyó el cese de la venta de papel a un «pase de factura por nuestra línea editorial», que identificó como independiente.

En Venezuela se viene registrando desde hace más de dos años una merma en la venta de las divisas oficiales para importar diversos bienes y papel periódico, lo que ha llevado a la mayoría de los diarios del país a una crisis.

Carlos Correa, director ejecutivo de la organización no gubernamental Espacio Público que se dedica a la protección de los derechos de los periodistas y la defensa de la libertad de expresión, consideró «muy grave» el caso de El Carabobeño y sostuvo que «se les está castigando» con no darle papel por su posición crítica hacia el gobierno.

Desde 2013 ocho diarios venezolanos han salido de circulación -algunos temporalmente y otros de forma definitiva- debido a la falta de papel, según estimaciones de Espacio Público. «Hay 85 diarios en jaque», por la escasez de papel y otros problemas económicos, precisó Correa.

Venezuela se encuentra sumida en una compleja crisis económica con una desbordada inflación, severos problemas de desabastecimiento y una fuerte recesión que los analistas estiman que podría agudizarse por la caída de los precios del petróleo, que financian cerca de 94% de los ingresos del país por exportaciones.