Margaret Chan, directora general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), informará mañana de los últimos datos respecto a la epidemia de zika en América Latina, los avances científicos sobre las enfermedades que provoca, y las decisiones en relación a cuáles son las mejores herramientas para luchar contra el mosquito que transmite el virus.
A diferencia de lo que ocurrió con la epidemia de ébola en África occidental, la máxima responsable de la agencia sanitaria de las Naciones Unidas ha decidido estar en la primera línea mediática para informar sobre el brote de zika que asuela la región latinoamericana.
Mañana, Chan volverá a ofrecer una rueda de prensa para explicar en qué punto está la epidemia y para resumir lo que la organización que dirige ha hecho en las últimas dos semanas para luchar contra ella.
Los expertos confirmaron que las estrategias tradicionales llevadas a cabo hasta ahora para acabar con el mosquito (vector) Aedes Aegypti, responsable de la transmisión del virus del zika, pero también de la fiebre amarilla, del chikungunya y del dengue. son efectivas, siempre y cuando se hagan correctamente.
Las técnicas principales son: rociar con insecticida a los mosquitos cuando se les identifica; rociar con insecticida el interior y el exterior de las casa; eliminar los recipientes con agua estancada donde el insecto se desarrolla; protegerse personalmente usando repelente y ropas que cubran la mayor parte del cuerpo.
Los expertos detectaron, además, dos técnicas nuevas que van a ensayarse en pruebas piloto para poder evaluar posteriormente su efectividad.
Estas dos técnicas se refieren a dejar en libertad miles de mosquitos portadores de la bacteria Wolbachia, que modifica el metabolismo del mosquito y evita que el virus se desarrolle en él, y por lo tanto que se pueda transmitir.
Y la segunda opción se refiere a dejar en libertad mosquitos machos transgénicos que no consiguen llegar a la edad adulta y mueren antes de reproducirse, con el objetivo de que reemplacen a los que están en la naturaleza.
Por otra parte, se espera que Chan hable sobre el desarrollo de test de diagnóstico que puedan separar la infección por zika del contagio previo o actual con el dengue y el zikungunya.
Los expertos han llegado a la conclusión que no existe ni habrá a corto plazo una vacuna con la que inmunizar a la población, dado que su desarrollo está en un estadio muy temprano y las candidatas más avanzadas aún tardarán años en estar listas.
Hasta la fecha, 31 países de América Latina han detectado transmisión local del virus, siendo Brasil el país más afectado y, por ahora, el único que ha detectado una multiplicación por diez de los casos de microcefalia en recién nacidos, una causa-efecto que si bien aún no está científicamente probada, cada vez hay más evidencias de ella.