Ecuador es uno de los países que más avanzó en el tema de defensa de Derechos Humanos (DDHH). El canciller Guillaume Long, en su exposición ante la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (ONU), explicó los mecanismos que se establecieron en el país para investigar y esclarecer casos de violaciones a los DD.HH. La primera y una de las herramientas más importantes es la tipificación de la tortura “con sus propias circunstancias agravantes”, medida que además permite establecer y castigar casos como detenciones arbitrarias, desapariciones, violencia sexual, prostitución forzada, entre otros delitos.
Además en el caso ecuatoriano se estableció la denominada “Comisión de la Verdad”, en el 2007, instancia que investigó, resolvió y condenó hechos de violaciones a los derechos humanos entre los años 1984 a 1988 (entre otros periodos), tiempo del gobierno del socialcristiano León Febres-Cordero. En 2013, en este mismo tema, la Asamblea expidió una Ley para la Reparación de las Víctimas y la Judicialización de Graves Violaciones de Derechos Humanos y Delitos de Lesa Humanidad.
La tercera medida legal del Estado ecuatoriano fue en contra de la trata de personas, uno de los crímenes más combatidos en todo el mundo. El país estableció en su Código Orgánico Integral Penal los delitos contra la libertad personal, la prohibición de la esclavitud, bajo parámetros de las normativas internacionales. En este campo también se tomó en cuenta el tráfico de migrantes y otras formas de explotación.